jueves, 27 de octubre de 2011

VIOLENCIA CONTRA PERIODISTAS

ARTÍCULO PUBLICADO EN SDP NOTICIAS

Leñero[i] dice a propósito de la importancia del trabajo periodístico para una sociedad democrática:



“El periodismo es una forma de comunicación social a través de la cual se dan a conocer y se analizan los hechos de interés público. El periodismo resuelve de manera periódica, oportuna y verosímil, la necesidad que tiene el hombre de saber qué pasa en su ciudad, en su país, en el mundo y que repercute en la vida personal y colectiva (…) El periodismo cumple su función en la medida en la que se desarrolla no solamente con relativa libertad, sino como un ejercicio de liberación, tanto de quien lo practica como de quien lo digiere. El periodismo pervierte su función cuando tergiversa, cuando miente, cuando negocia y cuando escamotea la información”



Sin embargo, en estos tiempos no es fácil realizar la tarea de informar. Los periodistas tienen en este momento un reto muy grande frente a ellos: ¿cómo cumplir con la labor de informar cuando este hecho puede costarles la vida?

En entrevista con la periodista Carmen Aristegui[ii], Frank La Rue, relator de la libertad de expresión de la ONU, comenta en el contexto del análisis del estudio que realizaron en México a propósito del tema:

Lo más preocupante es la violencia contra periodistas. México tiene un problema de violencia en general por el combate al crimen organizado en ciertas zonas, pero es muy marcado que eso se manifiesta en violencia contra periodistas que están investigando el crimen organizado, publicando o investigando corrupción pública, inversiones extrañas o temas que pueden estar relacionados con el crimen organizado y en esos casos se reciben amenazas pero es ahí donde se han dado asesinatos de periodistas y todo tipo de formas de intimidación”

LAS CIFRAS

En Septiembre de 2010, la SIP[iii] (Sociedad Interamericana de Prensa) dio a conocer con datos y cifras, un informe llamado “Mapa de riesgos para periodistas en México”[iv]. En este informe, se detallan los 111 casos registrados de desaparición o muerte de periodistas en nuestro país desde diciembre de 1987 hasta septiembre de 2010. Al comenzar el sexenio del Presidente Felipe Calderón, han sido víctimas 62 periodistas. El año pasado evidenció la jornada más violenta del periodo de gobierno 2006-2010, con 18 profesionales de la comunicación asesinados o desaparecidos.

2006



Enero.- Coahuila

Marzo .-Tamaulipas y Michoacán

Julio.- Coahuila

Agosto.- Chihuahua

Octubre.- Oaxaca

Noviembre.- Veracruz (2), Guerrero y Michoacán

Diciembre.- Oaxaca



2007



Enero.- Tabasco

Abril.- Sonora y Guerrero

Mayo.- Nuevo León (2)

Octubre.- Oaxaca (3)

Diciembre.- Michoacán (2)



2008



Febrero.- Michoacán y Morelos (2)

Abril.- Oaxaca (2)

Octubre.- Tabasco, Chihuahua, Durango y Michoacán

Noviembre.- Chihuahua



2009



Febrero.- Guerrero y Veracruz

Mayo.- Durango y Coahuila

Julio.- Guerrero, Michoacán y Chihuahua

Septiembre.- Chihuahua

Octubre.- Sinaloa

Noviembre.- Michoacán, Jalisco y Durango

Diciembre.- Quintana Roo



2010



Enero.- Guerrero, Coahuila y Sinaloa

Marzo.- Tamaulipas (6) y Guerrero

Abril.-  Veracruz y Guerrero

Junio.- Guerrero (2)

Julio.- Chihuahua, Michoacán y Nuevo León

Septiembre.- Chihuahua





DATOS DUROS. Número de periodistas asesinados durante el período 2006-2010 en México. Datos por Entidad Federativa



  

Y es que no es fácil ser periodista en estos tiempos, donde existen zonas en las que es imposible tan sólo levantar una encuesta[v], como lo demuestra el caso de los trabajadores de Mitofsky y Parametría. En las zonas de guerra, no declaradas formalmente por el Gobierno, pero sí por el crimen organizado, simplemente no se puede trabajar.



La situación es particularmente grave, tratándose de un Estado democrático, como es México, porque si éste no puede brindar las mínimas garantías para la realización del trabajo periodístico, entonces la sociedad no tendrá acceso a la información que, como dice el Manual de Periodismo,  le permita conocer el estado de las cosas en su localidad, en su estado, en su país. Eso sin contar que en México, 9 de cada 10 asesinatos a periodistas  permanecen impunes [vi]



“NINGUNA NOTA VALE LA VIDA”



Andrés A. Solís, ex coordinador del programa de libertad de expresión del Centro de Periodismo y Ética Pública (Cepet) dio a conocer el “Manual de autoprotección para periodistas” que es una herramienta que busca dar a los comunicadores los elementos necesarios para una cobertura informativa libre de riesgos físicos y con ética periodística. Y es que como bien dice Solís a propósito de los riesgos de ejercer la profesión en la mayoría de los casos:



“No tenemos seguro de vida,  no tenemos seguro de gastos médicos, si un colega periodista es víctima de una agresión o por alguna circunstancia del destino no puede volver a trabajar, no hay una indemnización. No conocemos nuestros derechos laborales y somos incapaces de exigirlos”[vii]



Además, Solís afirma que en México,  7 de cada 10 agresiones en contra de periodistas son perpetradas a manos de entes gubernamentales, siendo los cuerpos policiacos los de mayor incidencia.



Los periodistas pueden ser héroes, pero no son tontos. Existen Entidades Federativas donde ejercer la profesión es cuestión de vida o muerte, lo que propicia un tipo de autocensura que a pesar de los riesgos trata valientemente de informar.



¿Qué hace el Estado Mexicano? Tomando en cuenta las estadísticas, prácticamente nada. Y surgen al ciudadano algunas preguntas en el contexto de ésta situación:

¿A quién conviene que existan cercos informativos en algunos Estados de la República Mexicana? ¿Por qué algunos miembros de la clase política pretenden legislar acerca de las redes sociales argumentando “desinformación”, “manipulación” y “terrorismo”? ¿Qué porcentaje del presupuesto de un Estado es destinado a pagar a los medios por limitar la cobertura informativa? ¿Y quién protege a los periodistas que deciden huir de sus Estados?[viii]



Por lo pronto, no es poca cosa lo que grupos como la Organización latinoamericana para la defensa de la democracia (OLADD)[ix] realiza, al alertar y denunciar ésta época como la peor para los periodistas de México dadas las condiciones en las que se ejerce hoy día la labor informativa en nuestro país. También la organización Artículo 19[x] y el Centro Nacional de Comunicación Social (CENCOS)[xi], son algunos de los organismos dedicados al tema de la libertad de expresión y que luchan por dar nombre a las estadísticas en que se han convertido los periodistas asesinados o desaparecidos en el período actual de gobierno, además de exigir justicia para las víctimas y sus familias.



El periodismo es, hoy por hoy, una de las profesiones más difíciles de realizar en nuestro país. Los profesionales de la información y la comunicación merecen trabajar en otras condiciones, en diferentes términos y con garantías, de otra forma la sociedad mexicana no tendrá elementos para formar su criterio, tomar decisiones y ejercer la ciudadanía en un marco de respeto y tolerancia, pero sobre todo de paz y seguridad.





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